Secretos de supervivencia de las suculentas: Explorando los órganos reservantes que les permiten sobrevivir en ambientes extremos
En botánica este término se aplica para describir a
una planta que posee alguna parte de su anatomía con la facultad de
almacenamiento de nutrientes. A este órgano en especial se le llama órgano
reservante o más comúnmente llamado órgano de reserva.
Este órgano, para que se denomine de esta manera,
debe estar claramente delimitado morfológicamente y cumplir la función de
ayudar a la planta adulta en las épocas desfavorables cuando puede faltar la
posibilidad de realizar sus funciones fotosintéticas o el agua. Es en estos
momentos donde este órgano cumple su función, pues al contener reservas de
carbohidratos y otros nutrientes, además de agua, permite a la planta
sobrevivir estos tiempos de escasez. Además, si la proporción de agua en este
órgano es muy alta se denominan órganos suculentos.
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Las suculentas en particular se mantienen verdes
durante la época desfavorable y consumen sus reservas de agua durante ese
período. Aunque algunas plantas llegan al extremo en estos momentos de estrés
de perder todas sus partes fotosintéticas (verdes) y rebrotar al finalizar la
crisis.
Los órganos reservantes en la planta adulta se
pueden originar en ocasiones independientemente tanto en el vástago como en la
raíz, y pueden agruparse por morfología y origen de la siguiente manera:
Provenientes del vástago:
Tallos subterráneos reservantes: Bulbo, Cormo, Cáudice, Rizoma, Tubérculo.
Tallos aéreos reservantes: Tallo caudiciforme, Paquicaulo, Lignotúber, Tallos suculentos.
Hojas suculentas.
Provenientes de la raíz:
Raíces "tuberosas".
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