Descubre por qué la jardinería es un antidepresivo natural

La naturaleza ha sido una fuente de inspiración y consuelo para el ser humano desde
tiempos inmemoriales. En un mundo cada vez más acelerado y tecnológico, es fácil olvidar
la importancia de conectarse con el entorno natural. Sin embargo, estudios recientes han
demostrado que la exposición a la naturaleza, en
especial a la Tierra, puede tener un efecto positivo en nuestra salud mental.

La jardinería es una actividad que nos permite conectarnos con ella de manera especial. De hecho, la tierra que utilizamos en jardinería puede ser un antidepresivo natural por sí sola, y no se necesita una receta médica para disfrutar de sus beneficios. Los electrones libres presentes en la superficie de la tierra pueden ser absorbidos por nuestro cuerpo al caminar descalzos sobre ella, o al estar en contacto directo con ella. Es por eso que práctica, conocida como "earthing" o "grounding" (tomar tierra), puede reducir la inflamación y mejorar el sueño, la circulación sanguínea y la respuesta inmunológica del cuerpo. Además, interaccionar con la naturaleza a través de la jardinería nos permite también reducir el estrés y aumentar nuestra sensación de bienestar. Así que, siéntete libre de descalzarte y disfrutar del contacto con la tierra en tu jardín.

Además, la exposición a la naturaleza puede tener un efecto calmante en la mente.
Estar en contacto con plantas, y en sí con la natural puede reducir los niveles de estrés
y ansiedad, y mejorar el estado de ánimo. Incluso la vista de la naturaleza puede ser
suficiente para producir estos
efectos, según investigaciones realizadas por la Universidad de Stanford.

En un mundo donde la depresión y la ansiedad son cada vez más comunes, es importante recordar la importancia de conectarse con la naturaleza y esto lo podemos realizar en casa con nuestros jardines. También podemos pasar tiempo al aire libre, caminar descalzos sobre la tierra, disfrutar de un día soleado o simplemente contemplar la belleza del paisaje puede tener un impacto positivo en nuestra salud mental. Además, practicar el "earthing" o "grounding" (El earthing o grounding, literalmente traducido como “toma de tierra”, básicamente consiste en caminar descalzo pero no por cualquier sitio, sino en la naturaleza) puede ser una forma sencilla y efectiva de mejorar nuestra salud física y emocional.

Además de lo anterior, estudios recientes brindan posibilidades prometedoras en relación a un microorganismo llamado Mycobacterium Vaccae, el cual se encuentra de forma común en la naturaleza y específicamente en la tierra. Diversas investigaciones han demostrado que tener contacto constante con esta bacteria puede tener efectos asombrosos en pacientes con cáncer de pulmón avanzado, incluso en aquellos que están recibiendo quimioterapia. Un estudio publicado en la revista Annals of Oncology en 2004 encontró que los pacientes que recibieron tratamiento con Mycobacterium Vaccae reportaron mejoras significativas en su calidad de vida, salud global, funcionamiento cognitivo y físico, vitalidad y disminución del dolor. Estos resultados son un avance importante en la búsqueda de tratamientos efectivos y seguros para mejorar la salud y calidad de vida de los pacientes con cáncer.

Otro experto en enfermedades del corazón como lo es el cardiólogo estadounidense Stephen T. Sinatra ha investigado la relación entre el contacto con la tierra y la salud del corazón. En su libro "Earthing, con los pies descalzos", el autor explica cómo las suelas de goma o el cemento pueden interrumpir un circuito natural de recarga constante: el contacto con la tierra. Esta desconexión puede provocar trastornos psicológicos, dolor, cansancio e insomnio, según el autor. La solución, según Sinatra, siempre ha estado bajo nuestros pies. El libro es un llamado a la reflexión sobre nuestra relación con la naturaleza, y una invitación a reconectar con la tierra para mejorar nuestra salud cardiovascular y bienestar emocional.

Otro estudio realizado en Finlandia y publicado en la revista Environment International a finales del 2021, reveló resultados fascinantes. En este estudio, un grupo de investigadoras intervino jardines infantiles llevando al patio vegetación de bosque. Los resultados fueron sorprendentes, ya que se observó un aumento en las células T reguladoras y las citoquinas antiinflamatorias en la sangre de los niños. Esto sugiere que las intervenciones basadas en la naturaleza pueden conferir beneficios para la salud al promover la función antiinflamatoria e inmunorreguladora, y prevenir la inflamación inapropiada, factor de riesgo para el desarrollo de trastornos psiquiátricos relacionados con el estrés. El profesor Christopher Lowry, investigador de la Universidad de Colorado Boulder, ha estado siguiendo de cerca estos avances y comenta que los resultados son alentadores y abren nuevas posibilidades en la investigación sobre los beneficios de la naturaleza en la salud humana. Este estudio es una muestra más de la importancia de la conexión con la naturaleza para nuestra salud y bienestar emocional.

En conclusión, la Tierra es un antidepresivo natural al alcance de todos. Conectar con la naturaleza puede mejorar nuestra salud mental y física, y es una forma efectiva de reducir los niveles de estrés y ansiedad. No hay excusa para no disfrutar de los beneficios de la naturaleza, así que descubre el poder curativo de la Tierra en tu jardín.